Ya que la memoria nunca ha sido una muy buena aliada en cuanto a dinerito se trata, en la antigua Mesopotamia hace hace 5,000 años se encontraba Marian, un sumerio que estaba inventando la escritura cuneiforme con un solo objetivo: medir la fortuna del rey.
Los sumerios decidieron grabar imágenes de sus bienes en arcillas dando nacimiento a la escritura, en estas arcillas plasmaban todas las transacciones y la posesión de objetos que tenía el rey, la escritura cuneiforme produjo obras literarias brillantes y permitió obtener procedimientos administrativos entre ellos la contabilidad, el primer antecedente de nuestros estados de situación patrimonial había nacido.